En vista
del diluvio que estamos viviendo en este momento, no puedo más que pensar en
que pronto será Septiembre y con eso el verano se nos viene encima.
Añoro esos
días de sol, de calor, de bloqueador con olor a coco o a cualquier fruta de
verano. Extraño mis poleras (o remeras), mis short, mis faldas cortas, pero más
extraño mi traje de baño y nadar… simplemente nadar.
¿Nadar?
¿Traje de baño? ¿Así como estoy? ¡Antes muerta!
¡Chupalla!
¡Se viene el verano! Con eso se vienen las dietas, los ejercicios y
básicamente, se viene el hambre.
Lo único
bueno que tiene el hambre y las dietas, son la leche cultivada y el yogurt Diet.
¡Eso sí que me encanta! Por alguna razón, los venden tan bien en la TV que uno
termina creyendo el cuento de que sin esos yogures seguiremos gordas. Y lo más
gracioso es que te convencen que tienes “transito lento”. No sé ustedes, pero
el resto del año, yo no sufro de transito lento, pero en el verano, siento que
sin uno de esos yogurt, no podré ir al baño. No importa cuál sea la marca del
yogurt, siempre se nos habla de lo tanto que nos cuesta ir al baño… Como si esa
fuese la razón de estar gordas… Aparte que ponen a unas raquíticas, que aunque
acumularan caca, ni se les notaria.
Con las
dietas también vienen los cereales en la mañana, donde tenemos que dejar el
chocapic, por cereales sin azúcar, sin brillo y sin sabor. Esos cereales que
uno no quiere ni probar, pero que en el supermercado se los regalan a todas las
gorditas… o sea, llevo años recibiendo esas bolsitas.
¿Y cómo
vamos a hacer dieta sin una botella de agua en la mano? Eso sí que es patético.
Creer que por hacer harto pipi uno va a adelgazar. Y tan tonta que se ve la
gente con una botella en la mano. Peor si la botella es de alguna bebida
energizante o un agua hidratante, súper cara, que uno se termina comprando por
la botella. Y no te vayas a olvidar, que lo más importante de la botella no es
la calidad del plástico, sino el pituto que tiene en la boca, porque la tapa
rosca ya pasó de moda.
Bueno,
igual no más que voy a hacer dieta si quiero ir a nadar a un lugar público o
con algún conocido o amigo. Recibiré de buena gana los cereales que me den y
los voy a mezclar con el yogurt de transito lento. Y ya tengo lista mi botella
de agua, de medio litro y de agua hidratante… no soy más que el resultado del
molde de gorda preocupada por el verano…
No se si vas a conseguir auspiciadores así jajaja!
ResponderEliminarCon lo de la botella de agua...nada que hacer, ya forma parte del inconciente colectivo: verano=dieta=botella de agua ... en microsegundos tienes la mente inundada de la imágenes de mujeres haciendo ejercicio, corriendo por un verano sin polera...